Se enamoró de ella locamente;
como dos se enamoró... y de qué manera...,
hasta el punto de enfadarse con el que era
su álter ego: un charlatán nada obediente.
Regañó a su otro yo, porque imprudente,
con la broma distanció a su compañera
(mariposas, que en sus tripas de madera,
provocaban carcajadas en la gente).
Mas la historia entre ella y él, vio su final
pues las mofas los habían separado;
acercando, sin embargo, algo fatal.
Pues al tiempo de haber sido abandonado,
con alcohol, él y su amigo por igual,
en un fuego dieron todo por zanjado.
GaDe 7/8/2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario