A nadie le aconsejo
que ceda el cetro al vino,
mas sí que con él cuente,
no ya como un amigo,
sino como ese otro
que, con sus chascarrillos,
provoca una sonrisa,
aun de nosotros mismos.
El vino es colosal
si no lo haces un vicio;
ni te hace hablar de más
o correr un peligro;
si no has de trabajar,
por lo que trae consigo;
si no debes juzgar
o resolver conflictos;
ni vas a declarar
o vas a ser testigo;
si no te hace casar,
o vistes de padrino;
o no eres de fiar
a Venus compromiso;
o si no has de pensar
despacio y con sigilo...;
pero por lo demás...,
¡procura disfrutar
de tu buen paladar,
y bébete un buen vino!,
GaDe 31/12/2020
P. S. pero que sea poquito.