Soy como un payaso viejo,
maquillándome, en silencio.
Las lágrimas de mis mejillas
hacen llorar al espejo.
-¿Qué pasó con la alegría,
acaso estabas fingiendo?
Y ¿qué fue de aquellos días
de los aplausos y besos?
¿Y los niños?
-¿Y los niños?
-¡Detrás! ¿Te has quedado ciego?
¿Los ves?, ¡se ríen de ti!
Se hicieron mayores ellos.
Los niños ya no te quieren.
¿Qué pasa tienes complejos?
La piel se te ha ido plegando,
pero eso es cosa del tiempo.
¡Cállate y no llores más!,
que no te aguanto, ¡silencio!
La vida viene y se va...
¡Que entre ya el payaso nuevo!
- Pero..., ¡una duda me queda!
¡Pregunta, venga, ligero!
- Cuando me reí, ¿fingí?
La vida es vida, fingiendo.
GaDe 18/01/2014
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