La Flor
Yo me acerqué a mirarla como a flor
que exhibe su belleza a campo abierto;
pensé hacerme en su tallo hasta un injerto,
pues ya caí cautivo de su amor.
Pedí todo detalle al sembrador,
y oyendo su respuesta, quedé yerto;
-Pedí y le suplique!: no sea cierto.
-Y dijo puede ser que este calor...
y un mozo que un un hábil jardinero,
la dé lo que ella quiere su cuidado,
mas él la quiere más como florero.
Usted, que es el que allí mismo ha sembrado,
no deje que la corte pues me muero,
yo en vida la tendré y seré su amado.
Por Dios se lo he jurado!;
Si no esta misma noche la transplanto,
viviendo para siempre en nuestro encanto.
GaDe 29/7/2014 a la mujer que por saberse bella flor,
no busca ser florero, y sí el amor.
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