Crucifixión
Un favor, Padre Santo, de tu gusto,
quisiera que Tú a mí me concedieras;
mas no pido imposibles ni quimeras
pues todo te es posible por Augusto.
Si tengo que sufrir yo no me asusto,
pues temo más por Ti que por las fieras,
mas cuida no traspase las fronteras
donde masquen mentira en mi disgusto.
Yo bien sé qué supone tu Palabra:
prometes más desierto que vergel,
mas tampoco ha de ser ruta macabra.
Y si toca vinagre junto a hiel,
hoy, antes que el costado se me abra,
te ruego que yo expire siendo fiel.
GaDe 19/5/2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario