Fúlgido galán!
Él es el que te lava..., y pone guapo,
pues si se allega a ti, ya a enamorarte,
allá donde tú vas, en cualquier parte,
lo llevas cual fragancia, asida al trapo.
Te quedas en su amor..., como un gazapo
que acaba de nacer; y al relajarte,
lo sientes cual pasión, de allí su parte,
y de su profesión sólo me atrapo.
Oh fúlgido galán de Cuerpo Santo!
que das la dimensión más oportuna,
a Ti sea mi loor...; al suelo el manto.
Reflejos de candor das a la luna
pues me has enamorado con tu encanto:
mañanas de David..., canta la tuna.
GaDe 13/10/2014 al Espíritu Santo, Dios, para más gloria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario