¡Qué sutileza en los versos
de Bécquer! ¡Cuánta armonía
musical al declamar
su amor y su poesía!
¡Quién pudiera revivirlo
para alimentar la estima
del alma que, en la palabra,
se desnuda y se desvirga!
Yo, osado, tomo el testigo
y, sin pretensión, os digo
qué es el amor en la vida...:
El amor es la corona
de gracia, a él nada obliga,
pues no depende de hombre
o mujer: flores de un día,
El amor cuece despacio...,
a fuego lento, en arcilla,
no es un plato sin receta,
pues el cielo lo cocina.
El amor es chirimiri,
es chiringa o aguacero,
el amor es jarrear
agua viva y sentimiento,
el amor, cuando nos cala,
nos enferma de un dialecto
perpetuo y universal
que haya remedio en el Cielo.
El amor todo lo puede;
al amor hay que vencerlo
a base de desengaños
y de pruebas en el tiempo.
El amor es tu defensa,
y es también tu privilegio,
es aire de libertad
que Dios nos da, porque es Bueno.
¿Qué es el amor me preguntas,
contemplando el cielo azul?...
El amor es lo sublime
de Jesucristo: es Su luz.
GaDe 10/08/2024